El laberinto del fauno
Guillermo del Toro
España y México, 2006
Género: drama
Ciertos progresistas y positivistas consideraron que era cuestión de tiempo. Sí, a medida que los años pasaran, el hombre se haría más poderoso. Se conocería más, se viviría mejor, con todas las comodidades que uno pudiera imaginar. “En la era moderna (y ni que hablar la posmoderna) todo es más fácil”, pensaron (y algunos siguen pensando: la experiencia no les basta). Alimentarse, divertirse, pensar, matar: absolutamente todo es más fácil.
Pero resulta que ese modelo optimista, ingenuo y absolutamente estúpido se derrumbó con los desastres del siglo XX: las guerras mundiales, los genocidios, dictaduras fascistas y comunistas con sus respectivos asesinatos, etc. El mundo se pervirtió en cuestión de segundos, si lo comparamos con la historia de la humanidad.
Y a veces uno piensa en todos los pecados y delitos que se cometieron en ese maldito siglo, tan cercano, y se pregunta cómo pudo ser. Cómo pudo ser que se llevaran a cabo matanzas tan primitivas, dignas de un animal y no de un ser racional. O quizá dignas, sí, de un ser absolutamente racional, de la sinrazón de la razón. De la ausencia de alma.
En ese momento se puede llegar a pensar en lo que dijo Russeau: “El hombre es bueno por naturaleza”. Sí, es la sociedad la que lo pervierte. El hombre primitivo era bueno. La ambición por la grandeza y el olvido de las limitaciones humanas llevan a la soberbia. Y entonces, ¿son primitivas las masacres del siglo XX? No. Todo lo contrario. Son absolutamente coherentes con el contexto social y cultural en el que se encuentran. ¿Por qué la sorpresa, entonces?
Afortunadamente existen grietas en el sistema corrupto. Y esas grietas son personas que se paran frente a la injusticia, la mentira y la soberbia. Gente luchadora, valiente, perseverante, fantasiosa, sensible y con mucha imaginación.
Ahora cabe preguntarse por la inocencia. ¿Cómo actúa un niño inocente ante un mundo pervertido? Hay una escapatoria: la fantasía.
El laberinto del fauno se sitúa en 1944, en la España franquista. Ofelia, la niña protagonista de esta historia, se ve inmersa en un viaje por la fantasía, la única escapatoria del mundo real.
En ese laberinto de fantasía todo es posible. Las hadas, las llaves que abren misterios, las puertas, las entradas y salidas. ¿Es la fantasía la escapatoria perfecta para un niño? ¿Y para un adulto? ¿La muerte? Nunca el suicidio, sino la muerte digna de un luchador.
Ofelia está a medio camino entre el mundo infantil y el adulto, entre el mundo real y el de fantasía. Y así debe crecer de golpe y tomar como consuelo la escapatoria adulta, pero siempre entrelazada con su fantasía, su sueño: el único sitio en el mundo en donde hay color y alegría. Y así regresar a los orígenes, a la bondad, a la naturaleza pura. Sí, al primitivismo.
sábado, 8 de diciembre de 2007
jueves, 15 de noviembre de 2007
La coherencia y credibilidad en Frida
Frida, naturaleza viva
Paul Leduc
1984, México
Género: drama
Frida
Julie Taymor
2002, Estados Unidos
Género: drama
Frida, naturaleza viva (1984) y Frida (2002) cuentan la tormentosa vida y la obra de Frida Kahlo. Si bien son muy distintas, hay una cierta coherencia en los hechos que tratan ambas películas, aunque una de ellas prefiere profundizar en unos y otra, en otros.
Se habla de Frida y la pintura, Frida y Diego Rivera, Frida y los hombres, Firda y el comunismo y la obra social y, por último, Frida y Trotsky. Todas tienen, al menos, un poco de estos temas.
El ritmo pausado y la narración caótica de Frida, naturaleza viva la hacen especial, diferente, tal como la vida y obra de Frida. Parece que en la primera versión hubiese una minuciosa preocupación por el detalle. El detalle histórico, algo muy necesario para la tranquilidad mental del espectador.
En cambio, Frida de Salma Hayek tiene otra velocidad. Exactamente la velocidad del siglo XXI. A esta altura, una película con tantas pretensiones (a libre criterio) no podría lograrse de otra forma. Y no está mal. También tiene sus puntos a favor. Como la Fotografía de Prieto (el mismo de 21 gramos y Babel). Si hay algo que recuerdo con claridad de esta película, es la fotografía.
Ambas muestran la vida apasionada de la protagonista, pero en la versión de Salma Hayek hay exageración. De esas exageraciones que hacen pensar en las películas taquilleras. Lo que, repito, no significa que esté mal. Es una constante en el cine que vuelve a versionarse con el correr de los años. Posiblemente sea producto del cambio social, de los tabúes cada vez más ausentes. O quizá sea sólo una cuestión de moneda (como decían Los Rodríguez).
Finalmente, en la primera versión hay coherencia. Coherencia en la forma y contenido de la película y la vida de Frida Kahlo. Eso no pasa, precisamente, en la versión hollywoodense de Salma Hayek, en la que todo parece tomado de alfileres, con mucha superficialidad y, por tanto, poco creíble.
martes, 13 de noviembre de 2007
La política y el cine de los '80
En el campo de la Política muchas dictaduras finalizaron en seguidilla, entre ellas las de Perú (1980), Bolivia (1982), Argentina (1983), Uruguay (1984), Brasil (1985), Filipinas (1986), Haití (1986), Paraguay (1989) y Chile (1989). Mikkhail Gorbachov llegó al Kremlim en 1985 e inició con la perestroika y la glasnot una revolución que iba a conmover los fundamentos de la URSS y del comunismo europeo. Uno por uno fueron cayendo los gobiernos comunistas de Europa Oriental. La caída del muro de Berlín en 1989 fue el símbolo del derrumbe del comunismo. Otra ideología que cayó a finales de esta década fue la del apartheid (segregación racial) en Sudáfrica.
En Pakistán Benazir Bhutto se constituyó en la primera mujer musulmana en llegar a la jefatura de un gobierno.
En lo referente a conflictos bélicos, mientras las relaciones entre Israel y Egipto se normalizaban con la devolución del Sinaí a Egipto en 1982, se daba la victoria británica en la Guerra de las Malvinas. Washington se embarcó en aventuras agresivas en Granada, Líbano, Libia, Nicaragua y Panamá. Tropas soviéticas invadieron Afganistán en 1980. En 1988 termina un sangrienta guerra entre Irak e Irán, guerra que duró 8 años y dio cuenta de al menos un millón de muertos. Los disturbios sociales estuvieron a la orden del día, se dieron verdaderos masacres en América Central, Medio Oriente y China.
Aprovechando la distancia tecnológica que separaba a los Estados Unidos de la URSS, el presidente Ronald Reagan anunció el desarrollo de un nuevo sistema de defensa contra un hipotético ataque nuclear soviético, que consistía en una especie de escudo protector basado en la Tierra y en el espacio, y que hacía un amplio uso de la capacidad satelital. A esta aplicación de la tecnología para la defensa militar se la denominó la "Guerra de las Galaxias".
Esta década dejó muchas muertes, asesinatos y catástrofes, cabe resaltar el fallecimiento de: Jean-Paul Sartre, el psicólogo Piaget (1980), el pintor Joan Miró (1983) y el asesinato de John Lennon (1980). Y catástrofes como: la tragedia en Bhopal (India - 1984) cuando una nube de gas tóxico se escapó de un tanque de pesticidas, matando a 4.000 personas y afectando a más de 200.000, en el accidente industrial más grande de la historia; las hambrunas en los países africanos; el anuncio de la reducción de la capa de ozono (1985); el devastador terremoto que azotó a la Ciudad de México (1985); la explosión de un reactor nuclear en la planta de Chernobyl (1986), años después los expertos calcularon en 40.000 los casos de cáncer y en 6.500 las muertes producidas a lo largo del tiempo por los efectos de la contaminación.
En el aspecto de la economía, los países industrializados rechazaban el modelo Keynessiano que se apoyaba en los gastos del Estado para estimular el consumo, y escogieron la economía neoliberal fundamentada en desatar al sector privado de constricciones burocráticas e impuestos excesivos.
Para América Latina ésta fue la "década perdida", se juntaron el desempleo, hiperinflaciones, deuda externa por las nubes, la insalubridad, la violencia social, el narcotráfico y la contaminación ambiental.
En el área del cine de los 80, películas como Blade Runner, Terminator, Batman, Indiana Jones, E.T. y Back to the future fueron algunos de los éxitos de taquilla. ¿Cómo influyó la política y economía de los 80 en el cine? Esto puede verse en la violencia de ciertas películas, que luego la década de los 90 recibirá con un mayor grado. De todas formas, los conflictos, guerras y asesinatos internacionales influyeron en películas como Terminator.
Con respecto a la capa de ozono y el comienzo de la era de catástrofes ambientales como el de Chernobyl pudieron haber influido en películas asociadas a la ciencia ficción y el futuro. Aquí se puede ejemplificar muy bien con Blade Runner.
Por supuesto que en Terminator, Blade Runner y Back to the future hay una gran presencia de la tecnología. Quizá la aplicación de la tecnología para la defensa militar (Reagan vs. URSS) hayan sido una influencia para las dos primeras películas.
Se puede decir entonces que en el cine de los años 80, al igual que en la política internacional, se cometen excesos y mucha violencia.
domingo, 4 de noviembre de 2007
La sociedad para Scorsese
Taxi driver
Martin Scorsese
Estados Unidos, 1976
Género: drama
Después de hora
Martin Scorsese
Estados Unidos, 1985
Género: drama
Martin Scorsese muestra una visión crítica de la sociedad neoyorquina de los 70 con Taxi driver. Como lo dice el personaje de Robert de Niro: las calles de New York están llenas de basura. En esta película se perciben prejuicios, racismo y mucha intolerancia. La prostitución, las diferentes etnias y los homosexuales son, para el taxista demente, la basura de las calles neoyorquinas.
Algo bastante irónico es que, el resto de los taxistas compañeros de de Niro, aparentemente cuerdos, piensan como él y tienen los mismos prejuicios. La única diferencia es que no llegan a cometer el crimen para plasmar sus ideas intolerantes. Quizá de Niro sí lo haya cometido por su experiencia de Vietnam: acción rápida y sin pensamiento.
Scorsese muestra que no sólo un demente veterano de Vietnam puede pensar así. Es toda la sociedad la que funciona mal. También la política. Ya en un principio, el dueño de la empresa de taxis le pregunta a de Niro: “¿Llevas a negros, prostitutas, etc?” Y de Niro responde que sí. Era de los pocos que se metían por lugares “peligrosos” de la ciudad.
Sus compañeros de trabajo se burlan de él por esto. Y hasta lo miran asombrados. Piensan que necesita dinero y no le interesan sus condiciones laborales a cambio de algún centavo. Pero la verdad es que no puede dormir. Y hace cualquier cosa para matar el tiempo y salir del infierno del recuerdo del horror.
Se puede decir que es la sociedad la que lo pervierte. Un compañero le ofrece el teléfono de un vendedor ilegal de armas. Otro señor le cuenta que va a matar a su esposa por haberlo engañado, etc.
La sociedad arruina al ser humano. La masa lleva a la perdición. También la guerra y la política. Esa es la visión que plantea Scorsese en Taxi driver.
En After hour la sociedad arruina a un ser humano corriente, trabajador y tranquilo. Hay un desquite arbitrario de la sociedad de Soho.
En todo momento el protagonista actúa de buena fe. Y todos sus actos benévolos lo llevan a meterse, cada vez más, en problemas. Como dice el empleado de uno de los cafés, a la madrugada: “Después de hora las reglas de juego cambian” (o algo así). Y justamente es eso lo que pasa en esta película. Es una historia retorcida e irónica en la que todos los actos buenos parecen malos y causan cada vez más problemas para el protagonista.
Provoca que el espectador desee que el protagonista actúe de mala fe porque sabe que, de lo contrario, estará en problemas. Que no vuelva a la casa de la suicida a devolverle su escultura, que no vuelva a la casa de la mesera con peinado raro. Pero él, como bueno hombre, regresa y cae, una vez más.
Martin Scorsese
Estados Unidos, 1976
Género: drama
Después de hora
Martin Scorsese
Estados Unidos, 1985
Género: drama
Martin Scorsese muestra una visión crítica de la sociedad neoyorquina de los 70 con Taxi driver. Como lo dice el personaje de Robert de Niro: las calles de New York están llenas de basura. En esta película se perciben prejuicios, racismo y mucha intolerancia. La prostitución, las diferentes etnias y los homosexuales son, para el taxista demente, la basura de las calles neoyorquinas.
Algo bastante irónico es que, el resto de los taxistas compañeros de de Niro, aparentemente cuerdos, piensan como él y tienen los mismos prejuicios. La única diferencia es que no llegan a cometer el crimen para plasmar sus ideas intolerantes. Quizá de Niro sí lo haya cometido por su experiencia de Vietnam: acción rápida y sin pensamiento.
Scorsese muestra que no sólo un demente veterano de Vietnam puede pensar así. Es toda la sociedad la que funciona mal. También la política. Ya en un principio, el dueño de la empresa de taxis le pregunta a de Niro: “¿Llevas a negros, prostitutas, etc?” Y de Niro responde que sí. Era de los pocos que se metían por lugares “peligrosos” de la ciudad.
Sus compañeros de trabajo se burlan de él por esto. Y hasta lo miran asombrados. Piensan que necesita dinero y no le interesan sus condiciones laborales a cambio de algún centavo. Pero la verdad es que no puede dormir. Y hace cualquier cosa para matar el tiempo y salir del infierno del recuerdo del horror.
Se puede decir que es la sociedad la que lo pervierte. Un compañero le ofrece el teléfono de un vendedor ilegal de armas. Otro señor le cuenta que va a matar a su esposa por haberlo engañado, etc.
La sociedad arruina al ser humano. La masa lleva a la perdición. También la guerra y la política. Esa es la visión que plantea Scorsese en Taxi driver.
En After hour la sociedad arruina a un ser humano corriente, trabajador y tranquilo. Hay un desquite arbitrario de la sociedad de Soho.
En todo momento el protagonista actúa de buena fe. Y todos sus actos benévolos lo llevan a meterse, cada vez más, en problemas. Como dice el empleado de uno de los cafés, a la madrugada: “Después de hora las reglas de juego cambian” (o algo así). Y justamente es eso lo que pasa en esta película. Es una historia retorcida e irónica en la que todos los actos buenos parecen malos y causan cada vez más problemas para el protagonista.
Provoca que el espectador desee que el protagonista actúe de mala fe porque sabe que, de lo contrario, estará en problemas. Que no vuelva a la casa de la suicida a devolverle su escultura, que no vuelva a la casa de la mesera con peinado raro. Pero él, como bueno hombre, regresa y cae, una vez más.
El arte de Kim Ki-duk
Parece que el castigo se convirtió en descubrimiento. Y qué descubrimiento. Kim Ki-duk, el surcoreano vanguardista y experimental cineasta, tiene la capacidad de dejar al espectador con los ojos bien abiertos. Desencadenamientos y finales impredecibles: nada mejor que eso.
Las tres películas (Primavera, verano, otoño, invierno… y otra vez primavera, Hierro 3 y El tiempo) son bien distintas. Primavera, verano… refleja las diferencias culturales. Muestra un mundo extraño a Occidente. Pero también muestra que a esa paz y tranquilidad, hábitos adquiridos por la educación oriental, puede perturbarse con el mundo civilizado. La sociedad civilizada pervierte al ser humano. Algo así como lo que decía Russeau: el hombre es bueno por naturaleza.
Con respecto a Hierro 3 debo destacar la excelencia en todo aspecto. La música llena cada escena de perfección absoluta. La expresividad en los rostros mudos de los protagonistas también es genial. Es ingeniosa, original y, sobre todo, tierna. Una buena idea plasmada con mucha creatividad. Este drama romántico, y además con final feliz e impredecible, demuestra que no todas las películas románticas tienen por qué ser cursis.
Ahora El tiempo, la que se encuentra más fresca en mi memoria. Impresionante. Resulta que le conté a un amigo de qué trataba y me dijo: “¿Estás segura que no era una de Tom Cruise o Denzel Washintong?”. Ahí noté que la historia, contada de otra forma, podría haber sido una película del montón. Hasta parecía superficial que una chica se hiciera una cirugía estética para cambiarse la cara porque teme que a su novio no le guste. Pero la película es mucho más que eso. Es el escalofriante tiempo. Ya al saber el título del film supuse que sería un drama morboso. Y así lo fue. Morboso, como el tiempo.
sábado, 27 de octubre de 2007
Vale el intento
La señal
Ricardo Darín y Martín Hodara
Argentina, 2007
Género: policial negro
Con la muerte de Eduardo Mignona, el creador de la novela y del proyecto cinematográfico de La señal, Ricardo Darín decide continuar con la película y pasar, también, al otro lado de la cámara.
Diego Peretti y Darín son dos de las figuras más consagradas del cine argentino. Verlos juntos en una película de cine negro ambientada en los años ’50 (valga decir: con una increíble y coherente estética) es sorprendente.
Pibe Corvalán es un hombre más “cascoteado por la vida”, como asegura Darín en una entrevista con La nación. En cambio, Santana (personaje interpretado por Diego Peretti) tiene más fe en el futuro. Ambos se toman su trabajo de detectives de manera distinta: Santana lo ve como un trabajo más, proveedor del dinero para vivir. En cambio, Darín está desconforme con su labor de detective mediocre que lo único que hace es seguir a maridos o esposas infieles.
Esa diferencia hará que ambos tomen, a mitad de la película, un camino diferente. Darín se deja engatusar por una bella mujer misteriosa (Julieta Díaz) que lo llevará a la perdición (elemento claro del cine negro). Esta mujer, aparece frente a Darín con más información de la que él cree que sabe. Ella conoce cada detalle y tiene todo fríamente calculado. Lo engaña. Y Darín queda muy mal parado dejándose vencer por una mujer mucho más inteligente que él.
La señal tiene varios elementos del cine negro clásico. En primer lugar, la estética. Una paleta de colores muy oscura y sombría, con uso de contraluz. Casi todas las escenas importantes se dan en la noche. Por otro lado, se ve un claro pesimismo en la sociedad, por el contexto de la muerte de Evita Perón, idolatrada por unos cuantos.
Aquella mujer que aparecía en El halcón maltés como un ser extremadamente complejo y engañoso, la femme fatal, se encuentra, también en La señal. Si se compara a Darín con Bogart, se puede decir que Bogart sale muy bien parado y Darín todo lo contrario. Bogart es inteligente, tiene cancha en su labor como detective. Siempre, en todo momento sabe que la mujer esconde algo y lo está engañando. Esa mujer no puede vencerlo. En cambio, Darín actúa como un tonto e ingenuo. Parece que en esta película argentina se le diera más cabida a la mujer, quizá sea cuestión de épocas de la filmación.
El bien y el mal, sí, están ambiguos: como en el cine negro. Pero este aspecto se da en La señal únicamente “tomado de alfileres”. Ya que la película es bastante predecible. Desde un principio está claro dónde está el bien y dónde está el mal. No es lo que pasaba en el Halcón Maltés que hay unos cuantos personajes, bien profundizados (no como aquí), que hacen dudar al espectador hasta último momento. Incluso Bogart.
Como muchos ya dijeron, La señal tiene una buena estética, buena música y buena fotografía. Pero no alcanza: hay gusto a poco. La historia no es convincente y es demasiado predecible para una película de “misterio”. No hay un buen tratamiento de los personajes: todo parece muy superficial y a la ligera.
Ricardo Darín y Martín Hodara
Argentina, 2007
Género: policial negro
Con la muerte de Eduardo Mignona, el creador de la novela y del proyecto cinematográfico de La señal, Ricardo Darín decide continuar con la película y pasar, también, al otro lado de la cámara.
Diego Peretti y Darín son dos de las figuras más consagradas del cine argentino. Verlos juntos en una película de cine negro ambientada en los años ’50 (valga decir: con una increíble y coherente estética) es sorprendente.
Pibe Corvalán es un hombre más “cascoteado por la vida”, como asegura Darín en una entrevista con La nación. En cambio, Santana (personaje interpretado por Diego Peretti) tiene más fe en el futuro. Ambos se toman su trabajo de detectives de manera distinta: Santana lo ve como un trabajo más, proveedor del dinero para vivir. En cambio, Darín está desconforme con su labor de detective mediocre que lo único que hace es seguir a maridos o esposas infieles.
Esa diferencia hará que ambos tomen, a mitad de la película, un camino diferente. Darín se deja engatusar por una bella mujer misteriosa (Julieta Díaz) que lo llevará a la perdición (elemento claro del cine negro). Esta mujer, aparece frente a Darín con más información de la que él cree que sabe. Ella conoce cada detalle y tiene todo fríamente calculado. Lo engaña. Y Darín queda muy mal parado dejándose vencer por una mujer mucho más inteligente que él.
La señal tiene varios elementos del cine negro clásico. En primer lugar, la estética. Una paleta de colores muy oscura y sombría, con uso de contraluz. Casi todas las escenas importantes se dan en la noche. Por otro lado, se ve un claro pesimismo en la sociedad, por el contexto de la muerte de Evita Perón, idolatrada por unos cuantos.
Aquella mujer que aparecía en El halcón maltés como un ser extremadamente complejo y engañoso, la femme fatal, se encuentra, también en La señal. Si se compara a Darín con Bogart, se puede decir que Bogart sale muy bien parado y Darín todo lo contrario. Bogart es inteligente, tiene cancha en su labor como detective. Siempre, en todo momento sabe que la mujer esconde algo y lo está engañando. Esa mujer no puede vencerlo. En cambio, Darín actúa como un tonto e ingenuo. Parece que en esta película argentina se le diera más cabida a la mujer, quizá sea cuestión de épocas de la filmación.
El bien y el mal, sí, están ambiguos: como en el cine negro. Pero este aspecto se da en La señal únicamente “tomado de alfileres”. Ya que la película es bastante predecible. Desde un principio está claro dónde está el bien y dónde está el mal. No es lo que pasaba en el Halcón Maltés que hay unos cuantos personajes, bien profundizados (no como aquí), que hacen dudar al espectador hasta último momento. Incluso Bogart.
Como muchos ya dijeron, La señal tiene una buena estética, buena música y buena fotografía. Pero no alcanza: hay gusto a poco. La historia no es convincente y es demasiado predecible para una película de “misterio”. No hay un buen tratamiento de los personajes: todo parece muy superficial y a la ligera.
sábado, 20 de octubre de 2007
El existencialismo de Bergman
El séptimo sello
Ingmar Bergman
Suecia, 1957
Género: drama
En El séptimo sello, Ingmar Bergman plantea cuestiones y reflexiones universales. Toda persona, en algún momento de su vida, se ha planteado el tema de la muerte y la existencia de Dios. ¿A dónde vamos? ¿Qué hay después de la muerte? Estas son las interrogantes que aparecen en este film, torturando la mente del caballero Antonius Block (Max Von Sydow).
La historia se ubica en la Edad Media. Antonius regresa de las Cruzadas, después de 10 años y se encuentra con una Suecia desolada por la Peste Negra. Se le presenta, al comienzo de la película, la Muerte en persona. Y él le propone jugar un partido de ajedrez para alargar su vida al menos un poco, con el fin de encontrar sentido a su existencia. Si Antonius gana, la Muerte lo dejará irse. De lo contrario, lo llevará consigo.
El título de esta obra, El séptimo sello, fue tomado del libro del Apocalipsis de San Juan. Bergman aludió, en esta película, a las pinturas medievales que trataban la danza de la muerte y los días del Apocalipsis.
Aparecen varios elementos medievales en esta película. En palabras del propio director, El séptimo sello surgió “contemplando los motivos de pinturas medievales: los juglares, la peste, los flagelantes, la muerte que juega al ajedrez, las hogueras para quemar a las brujas y las Cruzadas. Esta película no pretende ser una imagen realista de Suecia en la Edad Media. Es un intento de poesía moderna, que traduce las experiencias vitales de un hombre moderno en una forma que trata muy libremente los hechos medievales. En el Medioevo los hombres vivían en el temor de la peste. Hoy viven en el temor de la bomba atómica. El séptimo sello es una alegoría con un tema muy sencillo: el hombre, su eterna búsqueda de Dios y la muerte como única certidumbre».
Aunque, a decir verdad, el hombre, la muerte y la eterna búsqueda de Dios no es un tema tan sencillo como asegura Bergman.
El séptimo sello tiene mucha simbología y metáfora. En primer lugar, el blanco y el negro aparecen bien contrastados. El negro representa la muerte y el blanco, la pureza y nobleza. Así vemos a Mia o mismo al caballero Antonius bien iluminados, lejos de la Muerte oscura. También el tablero de ajedrez con sus fichas blancas y negras son un claro símbolo de la vida y la muerte.
La Muerte, que se presenta en la figura de un hombre, se muestra como algo terrenal y corpóreo. Parece que Bergman quisiera decir que esa muerte no puede afectar al alma.
El caballero y su escudero son dos personajes antagónicos. Se contraponen y se complementan. El caballero está preocupado por encontrar a Dios, por saber qué hay detrás de la muerte, quiere estar preparado para ese momento; por el contrario, su escudero es más terrenal, quiere vivir la vida y disfrutar.
Los nombres del matrimonio de juglares son Jöf (José), Mia (María). Además, en un momento Jöf tiene una aparición de la Virgen María con el niño Jesús. Esta bondadosa pareja de juglares aparece muy feliz, junto a su hijo. Son personas que no se cuestionan la existencia de Dios. Simplemente lo dan por hecho. Son extremadamente creyentes, hasta el punto de tener una aparición de la Virgen María. Bergman, en definitiva, termina mostrando a esta pareja como la puramente feliz, la que se salva, la libre del pensamiento atormentador que tiene que soportar el caballero Antonius.
Las fresas que Mia le ofrece al caballero son símbolo de la juventud y el erotismo, por tanto, de la Vida.
La reflexión final es que la muerte es la única certeza que tiene el hombre. Además, esta muerte es la única que hace a todos los hombres iguales. Completamente iguales: ricos, pobres, nobles y plebeyos. Todos mueren, no hay distinción.
Ingmar Bergman
Suecia, 1957
Género: drama
En El séptimo sello, Ingmar Bergman plantea cuestiones y reflexiones universales. Toda persona, en algún momento de su vida, se ha planteado el tema de la muerte y la existencia de Dios. ¿A dónde vamos? ¿Qué hay después de la muerte? Estas son las interrogantes que aparecen en este film, torturando la mente del caballero Antonius Block (Max Von Sydow).
La historia se ubica en la Edad Media. Antonius regresa de las Cruzadas, después de 10 años y se encuentra con una Suecia desolada por la Peste Negra. Se le presenta, al comienzo de la película, la Muerte en persona. Y él le propone jugar un partido de ajedrez para alargar su vida al menos un poco, con el fin de encontrar sentido a su existencia. Si Antonius gana, la Muerte lo dejará irse. De lo contrario, lo llevará consigo.
El título de esta obra, El séptimo sello, fue tomado del libro del Apocalipsis de San Juan. Bergman aludió, en esta película, a las pinturas medievales que trataban la danza de la muerte y los días del Apocalipsis.
Aparecen varios elementos medievales en esta película. En palabras del propio director, El séptimo sello surgió “contemplando los motivos de pinturas medievales: los juglares, la peste, los flagelantes, la muerte que juega al ajedrez, las hogueras para quemar a las brujas y las Cruzadas. Esta película no pretende ser una imagen realista de Suecia en la Edad Media. Es un intento de poesía moderna, que traduce las experiencias vitales de un hombre moderno en una forma que trata muy libremente los hechos medievales. En el Medioevo los hombres vivían en el temor de la peste. Hoy viven en el temor de la bomba atómica. El séptimo sello es una alegoría con un tema muy sencillo: el hombre, su eterna búsqueda de Dios y la muerte como única certidumbre».
Aunque, a decir verdad, el hombre, la muerte y la eterna búsqueda de Dios no es un tema tan sencillo como asegura Bergman.
El séptimo sello tiene mucha simbología y metáfora. En primer lugar, el blanco y el negro aparecen bien contrastados. El negro representa la muerte y el blanco, la pureza y nobleza. Así vemos a Mia o mismo al caballero Antonius bien iluminados, lejos de la Muerte oscura. También el tablero de ajedrez con sus fichas blancas y negras son un claro símbolo de la vida y la muerte.
La Muerte, que se presenta en la figura de un hombre, se muestra como algo terrenal y corpóreo. Parece que Bergman quisiera decir que esa muerte no puede afectar al alma.
El caballero y su escudero son dos personajes antagónicos. Se contraponen y se complementan. El caballero está preocupado por encontrar a Dios, por saber qué hay detrás de la muerte, quiere estar preparado para ese momento; por el contrario, su escudero es más terrenal, quiere vivir la vida y disfrutar.
Los nombres del matrimonio de juglares son Jöf (José), Mia (María). Además, en un momento Jöf tiene una aparición de la Virgen María con el niño Jesús. Esta bondadosa pareja de juglares aparece muy feliz, junto a su hijo. Son personas que no se cuestionan la existencia de Dios. Simplemente lo dan por hecho. Son extremadamente creyentes, hasta el punto de tener una aparición de la Virgen María. Bergman, en definitiva, termina mostrando a esta pareja como la puramente feliz, la que se salva, la libre del pensamiento atormentador que tiene que soportar el caballero Antonius.
Las fresas que Mia le ofrece al caballero son símbolo de la juventud y el erotismo, por tanto, de la Vida.
La reflexión final es que la muerte es la única certeza que tiene el hombre. Además, esta muerte es la única que hace a todos los hombres iguales. Completamente iguales: ricos, pobres, nobles y plebeyos. Todos mueren, no hay distinción.
miércoles, 17 de octubre de 2007
Antes y después: el cine negro
Sin city
Robert Rodríguez, Frank Miller, Quentin Tarantino
Estados Unidos, 2005
Género: policial negro
El halcón maltés
John Houston
Estados Unidos, 1941
Género: policial negro
El cine negro se interesó por los delincuentes y la parte oscura de la sociedad. Y es esto, justamente, lo que se ve en El halcón Maltés y en Sin city.
En ambas películas los protagonistas tienen que luchar por lo que ellos consideran el bien. Aunque hay una visión bastante ambigua del bien y el mal. Ya que el bien para Bogart sería su propio bien, sin importarle el resto (ni siquiera la vida de su socio). También pasa con el personaje de Mickey Rourke, que mata de forma extremadamente violenta a mucha gente para descubrir quién mató a una prostituta que conoció esa misma noche.
Se muestra, en El halcón Maltés, un gran individualismo por parte de todos los personajes, que se traicionan entre ellos para lograr sus objetivos. En cambio, en Sin city, los hechos violentos se dan por ayudar siempre a alguien. Aunque ese alguien persiga fines turbios, ambiguos. Rourke mata por una prostituta, las prostitutas del Old Town matan para ayudarse entre ellas, etc.
Hay una visión pesimista de la sociedad. Quizá esto se vea de forma más clara y explícita en Sin city. Estamos ante una ciudad negra, nocturna, del pecado. Todos tienen algo malo que esconder y hay mucha, mucha violencia. Y sobre todo: códigos distorsionados respetados por toda una sociedad. La sociedad del pecado, pero son códigos al fin. Si alguien se mete con una de las prostitutas de Old Town, Milo mata con extrema violencia. Ese es el código: los policías no pueden entrar a Old Town. Y si el código se rompe, hay conflicto.
Parece que en El halcón maltés los protagonistas, que actúan por fuera de los códigos éticos de una sociedad honesta, resaltan como delincuentes. Llaman la atención. Algo que no pasa en Sin city, que el asesinato prácticamente se ve como algo normal.
Los policías se ven ridículos en ambas películas. Ya sea corruptos (caso de Sin city y la pandilla de Benicio del Toro) o incompetentes (El halcón maltés). Por una cosa u otra, hay una visión negativa de la policía.
Los personajes tienen una marca trágica y esto desencadena toda la acción. En El halcón maltés, Bogart dice que debe descubrir quién mató a su socio para defender su pellejo de la policía que pretende culparlo. Y de aquí viene toda la trama. En Sin city cada uno de los personajes se ve marcado por un hecho trágico y eso determina su destino. Este es el caso de Bruce Willis que defiende a una niña de un violador, va preso por su honestidad, y esto lo marca de tal forma que a su salida de prisión la busca y esto lo lleva a la muerte.
La figura femenina gana protagonismo en el cine negro. En Sin city vemos que Old town está dominado por un grupo de mujeres fuertes, violentas, astutas e inteligentes. Jessica Alba, niña y luego mujer muy astuta, causa la perdición de Willis. Parece que el papel femenino pasa de ser inocente a ser una amenaza. En El halcón maltés, la mujer actúa con individualismo y complica toda la situación de Bogart hasta el final. Con ese aspecto bello e inocente esconde mentiras y una gran amenaza para Bogart.
Por último, los protagonistas masculinos aparecen como héroes racionales, individualistas y pragmáticos. Tanto en Sin city como en El halcón maltés se pueden ver protagonistas solitarios, rudos, soberbios e inteligentes: manejan las situaciones complicadas tal como un juego de ajedrez.
Robert Rodríguez, Frank Miller, Quentin Tarantino
Estados Unidos, 2005
Género: policial negro
El halcón maltés
John Houston
Estados Unidos, 1941
Género: policial negro
El cine negro se interesó por los delincuentes y la parte oscura de la sociedad. Y es esto, justamente, lo que se ve en El halcón Maltés y en Sin city.
En ambas películas los protagonistas tienen que luchar por lo que ellos consideran el bien. Aunque hay una visión bastante ambigua del bien y el mal. Ya que el bien para Bogart sería su propio bien, sin importarle el resto (ni siquiera la vida de su socio). También pasa con el personaje de Mickey Rourke, que mata de forma extremadamente violenta a mucha gente para descubrir quién mató a una prostituta que conoció esa misma noche.
Se muestra, en El halcón Maltés, un gran individualismo por parte de todos los personajes, que se traicionan entre ellos para lograr sus objetivos. En cambio, en Sin city, los hechos violentos se dan por ayudar siempre a alguien. Aunque ese alguien persiga fines turbios, ambiguos. Rourke mata por una prostituta, las prostitutas del Old Town matan para ayudarse entre ellas, etc.
Hay una visión pesimista de la sociedad. Quizá esto se vea de forma más clara y explícita en Sin city. Estamos ante una ciudad negra, nocturna, del pecado. Todos tienen algo malo que esconder y hay mucha, mucha violencia. Y sobre todo: códigos distorsionados respetados por toda una sociedad. La sociedad del pecado, pero son códigos al fin. Si alguien se mete con una de las prostitutas de Old Town, Milo mata con extrema violencia. Ese es el código: los policías no pueden entrar a Old Town. Y si el código se rompe, hay conflicto.
Parece que en El halcón maltés los protagonistas, que actúan por fuera de los códigos éticos de una sociedad honesta, resaltan como delincuentes. Llaman la atención. Algo que no pasa en Sin city, que el asesinato prácticamente se ve como algo normal.
Los policías se ven ridículos en ambas películas. Ya sea corruptos (caso de Sin city y la pandilla de Benicio del Toro) o incompetentes (El halcón maltés). Por una cosa u otra, hay una visión negativa de la policía.
Los personajes tienen una marca trágica y esto desencadena toda la acción. En El halcón maltés, Bogart dice que debe descubrir quién mató a su socio para defender su pellejo de la policía que pretende culparlo. Y de aquí viene toda la trama. En Sin city cada uno de los personajes se ve marcado por un hecho trágico y eso determina su destino. Este es el caso de Bruce Willis que defiende a una niña de un violador, va preso por su honestidad, y esto lo marca de tal forma que a su salida de prisión la busca y esto lo lleva a la muerte.
La figura femenina gana protagonismo en el cine negro. En Sin city vemos que Old town está dominado por un grupo de mujeres fuertes, violentas, astutas e inteligentes. Jessica Alba, niña y luego mujer muy astuta, causa la perdición de Willis. Parece que el papel femenino pasa de ser inocente a ser una amenaza. En El halcón maltés, la mujer actúa con individualismo y complica toda la situación de Bogart hasta el final. Con ese aspecto bello e inocente esconde mentiras y una gran amenaza para Bogart.
Por último, los protagonistas masculinos aparecen como héroes racionales, individualistas y pragmáticos. Tanto en Sin city como en El halcón maltés se pueden ver protagonistas solitarios, rudos, soberbios e inteligentes: manejan las situaciones complicadas tal como un juego de ajedrez.
viernes, 5 de octubre de 2007
Italia en posguerra
Ladrón de bicicletas
Vittorio de Sica
Italia, 1948
Género: drama
Ladrón de bicicletas pertenece al cine neorrealista de posguerra (1945-52). Se llamó cine neorrealista a aquellas historias ambientadas entre los sectores más desfavorecidos de la sociedad.
Gracias a los destrozos de la Segunda Guerra Mundial, no hay estudios disponibles para filmar (Cinecittà se encontraba ocupado por personas desalojadas, a causa de las penurias de la guerra), por lo que se decide salir a rodar a la calle. Los cineastas comienzan a interesarse por las historias realistas de la gente cotidiana. Aparecen temas como la pobreza, la destrucción, la división entre ex fascistas y personas que pertenecieron a la resistencia.
En el cine neorrealista se suelen ver escenarios naturales, miseria y ruptura de valores. Generalmente, explícita o implícitamente, se suele reflejar la cruel época de posguerra italiana.
Se utilizan nuevos modos de producción con iluminación natural y una importante presencia de actores no profesionales entre sus secundarios y, a veces incluso, entre sus protagonistas.
El cine italiano neorrealista muestra la realidad tal cual es. Como pasa en todo arte, lo que sucede en la sociedad se ve reflejado en la obra. Y fue esto lo que pasó en Ladrón de bicicletas.
El ladrón de bicicletas se presenta hoy como un testimonio de la Italia de posguerra.
Vittorio de Sica
Italia, 1948
Género: drama
Ladrón de bicicletas pertenece al cine neorrealista de posguerra (1945-52). Se llamó cine neorrealista a aquellas historias ambientadas entre los sectores más desfavorecidos de la sociedad.
Gracias a los destrozos de la Segunda Guerra Mundial, no hay estudios disponibles para filmar (Cinecittà se encontraba ocupado por personas desalojadas, a causa de las penurias de la guerra), por lo que se decide salir a rodar a la calle. Los cineastas comienzan a interesarse por las historias realistas de la gente cotidiana. Aparecen temas como la pobreza, la destrucción, la división entre ex fascistas y personas que pertenecieron a la resistencia.
En el cine neorrealista se suelen ver escenarios naturales, miseria y ruptura de valores. Generalmente, explícita o implícitamente, se suele reflejar la cruel época de posguerra italiana.
Se utilizan nuevos modos de producción con iluminación natural y una importante presencia de actores no profesionales entre sus secundarios y, a veces incluso, entre sus protagonistas.
El cine italiano neorrealista muestra la realidad tal cual es. Como pasa en todo arte, lo que sucede en la sociedad se ve reflejado en la obra. Y fue esto lo que pasó en Ladrón de bicicletas.
El ladrón de bicicletas se presenta hoy como un testimonio de la Italia de posguerra.
Western: lo viejo y lo nuevo
Más corazón que odio
John Ford
Estados Unidos, 1956
Género: western
Las desapariciones
Ron Howard
Estados Unidos, 2003
Género: western, drama
Las desapariciones gira alrededor de uno de los tópicos frecuentes del género western: el de la mujer blanca secuestrada por los indios. La acción transcurre a fines del siglo XIX en territorio de Nuevo México. Maggie (Cate Blanchett) vive en medio del campo con sus dos hijas, la pequeña Dot y la adolescente Lilly (Evan Rachel Word). Allí sobrevive trabajando como curandera, en compañía de un hombre con quien mantiene una relación bastante liberal y descomprometida, todo lo cual dibuja un perfil de mujer moderna.
Hay una modernización del género, la película incluye también el tópico de la familia disfuncional, representada aquí por un padre (Tommy Lee Jones) que abandona a sus hijas y esposa. Luego el padre regresará, como en todo buen western: siempre hay regreso. Aunque Maggie no quiere saber nada con él, no le quedará más remedio que recurrir a sus servicios cuando Lilly resulte secuestrada por los apaches.
Los indios, encabezados por el hechicero Pie Deforme, raptan mujeres blancas para venderlas en el mercado negro. El conflicto alrededor de la chica raptada admite aquí menos complejidades que el personaje de Natalie Word en Más corazón que odio, la obra maestra de John Ford. Allí, cuando el rescatador John Wayne daba con ella, se encontraba con una mujer tan asimilada a la tribu que hasta renegaba de su condición de blanca.
Aquí la cosa es mucho más sencilla, ya que Lilly siente espanto y repugnancia por sus salvajes secuestradores y lo único que quiere es huir de una buena vez de esa pesadilla. Lo cual simplifica toda la situación.
En Las desapariciones se ve un rasgo que en Más corazón que odio no era tan importante: la superstición y la magia negra. Pie Deforme es una figura más parecida a la de un demonio que a un ser humano. The missing tiene un grado de mística y brujería ausente en la película de John Ford.
Con respecto a la violencia, en Las desapariciones aparece muchísima sangre y las muertes o peleas se muestran más explícitamente que en Más corazón que odio, que es muy sutil.
Por último, el papel de la mujer en Las apariciones es mucho más importante que en Más corazón que odio. Cate Blanchett aparece como una mujer fuerte, capaz de hacer lo que sea por rescatar a su hija. Las mujeres son las protagonistas de la acción. En cambio, en el viejo western de John Wayne la mujer aparece en un segundo plano, víctima de la sociedad machista: simplemente como un objeto, una necesidad inmediata.
John Ford
Estados Unidos, 1956
Género: western
Las desapariciones
Ron Howard
Estados Unidos, 2003
Género: western, drama
Las desapariciones gira alrededor de uno de los tópicos frecuentes del género western: el de la mujer blanca secuestrada por los indios. La acción transcurre a fines del siglo XIX en territorio de Nuevo México. Maggie (Cate Blanchett) vive en medio del campo con sus dos hijas, la pequeña Dot y la adolescente Lilly (Evan Rachel Word). Allí sobrevive trabajando como curandera, en compañía de un hombre con quien mantiene una relación bastante liberal y descomprometida, todo lo cual dibuja un perfil de mujer moderna.
Hay una modernización del género, la película incluye también el tópico de la familia disfuncional, representada aquí por un padre (Tommy Lee Jones) que abandona a sus hijas y esposa. Luego el padre regresará, como en todo buen western: siempre hay regreso. Aunque Maggie no quiere saber nada con él, no le quedará más remedio que recurrir a sus servicios cuando Lilly resulte secuestrada por los apaches.
Los indios, encabezados por el hechicero Pie Deforme, raptan mujeres blancas para venderlas en el mercado negro. El conflicto alrededor de la chica raptada admite aquí menos complejidades que el personaje de Natalie Word en Más corazón que odio, la obra maestra de John Ford. Allí, cuando el rescatador John Wayne daba con ella, se encontraba con una mujer tan asimilada a la tribu que hasta renegaba de su condición de blanca.
Aquí la cosa es mucho más sencilla, ya que Lilly siente espanto y repugnancia por sus salvajes secuestradores y lo único que quiere es huir de una buena vez de esa pesadilla. Lo cual simplifica toda la situación.
En Las desapariciones se ve un rasgo que en Más corazón que odio no era tan importante: la superstición y la magia negra. Pie Deforme es una figura más parecida a la de un demonio que a un ser humano. The missing tiene un grado de mística y brujería ausente en la película de John Ford.
Con respecto a la violencia, en Las desapariciones aparece muchísima sangre y las muertes o peleas se muestran más explícitamente que en Más corazón que odio, que es muy sutil.
Por último, el papel de la mujer en Las apariciones es mucho más importante que en Más corazón que odio. Cate Blanchett aparece como una mujer fuerte, capaz de hacer lo que sea por rescatar a su hija. Las mujeres son las protagonistas de la acción. En cambio, en el viejo western de John Wayne la mujer aparece en un segundo plano, víctima de la sociedad machista: simplemente como un objeto, una necesidad inmediata.
domingo, 30 de septiembre de 2007
El enigma de Casablanca
Casablanca
Michael Curtiz
Estados Unidos, 1942
Género: Drama
La película Casablanca se estrenó en 1942, cuando la Segunda Guerra Mundial llevaba tres años disputándose y aún quedaban otros tres más para su fin. El film es considerado por muchos como uno de los mejores de la historia del cine. En el momento fue un elemento de propaganda camuflado bajo una historia ficticia.
En esta historia la descripción de las diferentes nacionalidades de los protagonistas representan a los distintos países participantes de la Guerra y también refleja las imágenes o posturas que deberían tomar en el futuro según el Gobierno de Estados Unidos y la industria de Hollywood.
La historia se desarrolla en Casablanca, Marruecos, en territorio de la Francia no ocupada. Francia tenía un protectorado en Marruecos desde 1912 (Tratado de Fez).
Durante la Guerra, Casablanca fue uno de los tres puntos de desembarque de las fuerzas aliadas para la invasión de África del Norte. Era un gran punto estratégico.
El guión fue muy estudiado. Se hizo mientras se rodaba la película. Curtiz declaró que tenía tres guionistas en el plató que escribían mientras el resto de personal rodaba. Lo habitual en Estados Unidos es que los productores compren una idea; Casablanca se compró como un guión de éxito, cuyo primer relato no tenía tintes propagandísticos. Cuando se empezó, entró en marcha la oficina de propaganda de Roosevelt, la Office of War Information, para evitar una imagen demasiado positiva de los alemanes o negativa de los aliados.
Se dice que el personaje de Rick representaba la imagen de Estados Unidos como país y la posición de éste en la Segunda Guerra Mundial. Así, cuando Rick finaliza ayudando a los “aliados” (Ingrid Bergman y Lazlo), acaba diciendo: “Este es el comienzo de una hermosa amistad”.
Michael Curtiz
Estados Unidos, 1942
Género: Drama
La película Casablanca se estrenó en 1942, cuando la Segunda Guerra Mundial llevaba tres años disputándose y aún quedaban otros tres más para su fin. El film es considerado por muchos como uno de los mejores de la historia del cine. En el momento fue un elemento de propaganda camuflado bajo una historia ficticia.
En esta historia la descripción de las diferentes nacionalidades de los protagonistas representan a los distintos países participantes de la Guerra y también refleja las imágenes o posturas que deberían tomar en el futuro según el Gobierno de Estados Unidos y la industria de Hollywood.
La historia se desarrolla en Casablanca, Marruecos, en territorio de la Francia no ocupada. Francia tenía un protectorado en Marruecos desde 1912 (Tratado de Fez).
Durante la Guerra, Casablanca fue uno de los tres puntos de desembarque de las fuerzas aliadas para la invasión de África del Norte. Era un gran punto estratégico.
El guión fue muy estudiado. Se hizo mientras se rodaba la película. Curtiz declaró que tenía tres guionistas en el plató que escribían mientras el resto de personal rodaba. Lo habitual en Estados Unidos es que los productores compren una idea; Casablanca se compró como un guión de éxito, cuyo primer relato no tenía tintes propagandísticos. Cuando se empezó, entró en marcha la oficina de propaganda de Roosevelt, la Office of War Information, para evitar una imagen demasiado positiva de los alemanes o negativa de los aliados.
Se dice que el personaje de Rick representaba la imagen de Estados Unidos como país y la posición de éste en la Segunda Guerra Mundial. Así, cuando Rick finaliza ayudando a los “aliados” (Ingrid Bergman y Lazlo), acaba diciendo: “Este es el comienzo de una hermosa amistad”.
sábado, 15 de septiembre de 2007
Uruguay en San Sebastian
Se viene el Festival de cine de San Sebastián, en el que participarán tres películas uruguayas en diferentes secciones.
-Acné (Sección: Cine en construcción) de Federico Viroj (director y guionista). Es una coproducción entre Uruguay, Argentina, España y México
Sinopsis: “Rafael Bregman, de 13 años, perdió la virginidad, pero nunca ha besado a una chica. Para alcanzar su sueño deberá combatir su acné, luchar contra su torpeza, ganarle a la timidez, asumir la adolescencia”.
La sección de Cine en construcción brinda oportunidades a las películas independientes latinoamericanas en fase de post-producción y ofrece a sus directores y productores, en colaboración con los Encuentros Cines de América Latina de Toulouse, un lugar de intercambio directo con profesionales e instituciones como paso decisivo para llegar al público.
-El baño del Papa (Selección Horizontes) de Enrique Fernández y Cesar Charlone. Una coproducción de Uruguay, Brasil y Francia. Seleccionada por Cine en Construcción 9 (2006) y en Un Certain Regard del Festival de Cannes 2007.
La selección Horizontes presentará películas inéditas en España, producidas total o parcialmente en América Latina, dirigidas por cineastas de origen latino o inspiradas en las comunidades latinas del mundo. Un jurado internacional decidirá el Premio Horizontes, dotado con 35.000 euros.
-Matar a todos (Sección oficial) de Esteban Schroeder. Uno de los intérpretes de esta película es Cesar Troncoso, también actor de El baño del Papa. Es una coproducción de Uruguay, Chile y Argentina.
Sinopsis: “Julia Gudari investiga el secuestro de quien resulta ser un químico chileno buscado como testigo por la justicia internacional. Todo indica que los militares uruguayos protegen a Berríos. Julia teme que su padre, el General Gudari, esté involucrado, pero las evidencias son escasas. En medio de la presión y las amenazas, Julia entiende que si quiere acceder a la verdad, tendrá que revisar su pasado para sanar sus heridas y superar sus miedos. Segundo largometraje del director de El viñedo”.
La Seccion oficial muestra a concurso una selección de la producción cinematográfica más reciente y que no haya competido en ningún otro festival. Dieciocho películas inéditas seleccionadas entre la mejor producción de todos los países, competirán por la Concha de Oro. De esta forma, el público y los medios de comunicación que acuden al festival pueden asistir a las últimas obras de algunos de los cineastas más apreciados.
Una historia sin ciudadania
El noctámbulo
Gabriel Díaz
Uruguay, 2006
Género: indefinido
El Noctámbulo es una historia de venganza por un ser querido disfrazada de historia de superhéroes. Una película mal hecha en varios aspectos: fotografía, actuaciones y guión. Nada resulta creíble. Ni siquiera, por suerte, que es uruguaya. No por el hecho de que sea mala, sino porque no tiene nada (exceptuando los locaciones, claro) que la haga uruguaya. Ni siquiera los diálogos, ni las palabras usadas, tonos de voz, movimientos, estilos de vida: nada.
No quiero dejar de lado las actuaciones, algo que me llamó demasiado la atención. El director, guionista y protagonista (el Noctámbulo) es simplemente patético. Su voz ambigua y aflautada hacen poco creíble su personaje inseguro.
Me da la sensación de que la fotografía se fue viendo en la marcha, sin mucha elaboración. Por lo menos quiero creerlo. Planos paupérrimos, irreales como toda esta película inverosímil.
A lo largo del filme me mantuve en una extraña situación de no lograr identificar si la historia era enserio o en broma. Ni siquiera estoy segura de que el director lo tenga claro.
La voz en off final del “superhéroe” y su mensaje de moralina son, simplemente, otra mancha más en el tigre. De verdad: no sé en qué estaba pensando el director.
Gabriel Díaz
Uruguay, 2006
Género: indefinido
El Noctámbulo es una historia de venganza por un ser querido disfrazada de historia de superhéroes. Una película mal hecha en varios aspectos: fotografía, actuaciones y guión. Nada resulta creíble. Ni siquiera, por suerte, que es uruguaya. No por el hecho de que sea mala, sino porque no tiene nada (exceptuando los locaciones, claro) que la haga uruguaya. Ni siquiera los diálogos, ni las palabras usadas, tonos de voz, movimientos, estilos de vida: nada.
No quiero dejar de lado las actuaciones, algo que me llamó demasiado la atención. El director, guionista y protagonista (el Noctámbulo) es simplemente patético. Su voz ambigua y aflautada hacen poco creíble su personaje inseguro.
Me da la sensación de que la fotografía se fue viendo en la marcha, sin mucha elaboración. Por lo menos quiero creerlo. Planos paupérrimos, irreales como toda esta película inverosímil.
A lo largo del filme me mantuve en una extraña situación de no lograr identificar si la historia era enserio o en broma. Ni siquiera estoy segura de que el director lo tenga claro.
La voz en off final del “superhéroe” y su mensaje de moralina son, simplemente, otra mancha más en el tigre. De verdad: no sé en qué estaba pensando el director.
¿Tres son multitud?
La quimera del oro
Charles Chaplin
Estados Unidos, 1925
Género: Comedia
Una noche en la ópera
Sam Wood
Estados Unidos, 1935
Género: Comedia
A la hora de comparar el humor de Chaplin con el de los Hermanos Marx hay que tener en cuenta que el cine de Chaplin es mudo, y el de los Marx utiliza un recurso fundamental para lograr la risa del espectador: el diálogo. Por otro lado, en el cine de Chaplin es un solo personaje el que genera el humor, y no tres como en el caso de los Marx. Teniendo en cuenta estos dos factores, comenzaré a describir la temática y el estilo de ambos, tomando en cuenta La quimera del oro y Una noche en la ópera.
Quien cataloga el humor de Chaplin como ingenuo, considero que no está tomando en cuenta el trasfondo social y dramático. Aún sin diálogos es posible distinguir la ideología comunista del protagonista. Escenas con simbolismos, como la del zapato en la olla, y un humor físico sin precedentes.
El personaje del vagabundo Charlote, a pesar de su cara de desgraciado, logra hacer reír y conmover. Es simpático y leal. El tratamiento de la mujer en esta película es increíble para la época. Se da la visión de una mujer como ideal, como meta a conseguir (además de la quimera del oro, claro). Todas las mujeres, no sólo la principal, son tratadas con mucho respeto. Es más: Charlote se muestra por debajo de ellas.
A pesar de tener escenas casi absurdas, como la del pollo, todo tiene sentido, todo responde a un ideal. Es una película con lógica e hilo conductor. Sin ni siquiera una palabra puede hacer desternillar de risa, aún más (en mi caso), que los hermanos Marx.
En Una noche en la ópera se repiten los chistes. Chistes absurdos, de burla a la autoridad por el mero hecho de ser autoridad. Groucho aparece como el avivado que se burla de todos. También de las mujeres, a las que ridiculiza.
Con el papel de mudo de Harpo Marx parece que se regresara al humor físico de Chaplin. Con gestos exagerados y simpáticos.
Al principio puede resultar jocoso algún chiste de Groucho o Chico, incluso las pavadas de Harpo. Pero la realidad es que la mecánica del humor se repite a lo largo de toda la película y hace los chistes demasiado predecibles al espectador. Diría que el humor de los Marx es un humor fácil, hoy en día obsoleto. En cambio, Chaplin y su personaje Charlote aún hoy logran la simpatía y gracia de sus inicios.
Charles Chaplin
Estados Unidos, 1925
Género: Comedia
Una noche en la ópera
Sam Wood
Estados Unidos, 1935
Género: Comedia
A la hora de comparar el humor de Chaplin con el de los Hermanos Marx hay que tener en cuenta que el cine de Chaplin es mudo, y el de los Marx utiliza un recurso fundamental para lograr la risa del espectador: el diálogo. Por otro lado, en el cine de Chaplin es un solo personaje el que genera el humor, y no tres como en el caso de los Marx. Teniendo en cuenta estos dos factores, comenzaré a describir la temática y el estilo de ambos, tomando en cuenta La quimera del oro y Una noche en la ópera.
Quien cataloga el humor de Chaplin como ingenuo, considero que no está tomando en cuenta el trasfondo social y dramático. Aún sin diálogos es posible distinguir la ideología comunista del protagonista. Escenas con simbolismos, como la del zapato en la olla, y un humor físico sin precedentes.
El personaje del vagabundo Charlote, a pesar de su cara de desgraciado, logra hacer reír y conmover. Es simpático y leal. El tratamiento de la mujer en esta película es increíble para la época. Se da la visión de una mujer como ideal, como meta a conseguir (además de la quimera del oro, claro). Todas las mujeres, no sólo la principal, son tratadas con mucho respeto. Es más: Charlote se muestra por debajo de ellas.
A pesar de tener escenas casi absurdas, como la del pollo, todo tiene sentido, todo responde a un ideal. Es una película con lógica e hilo conductor. Sin ni siquiera una palabra puede hacer desternillar de risa, aún más (en mi caso), que los hermanos Marx.
En Una noche en la ópera se repiten los chistes. Chistes absurdos, de burla a la autoridad por el mero hecho de ser autoridad. Groucho aparece como el avivado que se burla de todos. También de las mujeres, a las que ridiculiza.
Con el papel de mudo de Harpo Marx parece que se regresara al humor físico de Chaplin. Con gestos exagerados y simpáticos.
Al principio puede resultar jocoso algún chiste de Groucho o Chico, incluso las pavadas de Harpo. Pero la realidad es que la mecánica del humor se repite a lo largo de toda la película y hace los chistes demasiado predecibles al espectador. Diría que el humor de los Marx es un humor fácil, hoy en día obsoleto. En cambio, Chaplin y su personaje Charlote aún hoy logran la simpatía y gracia de sus inicios.
sábado, 8 de septiembre de 2007
El vampiro mas famoso
Comparación entre la versión de Tod Browning (1931) y la de Francis Ford Coppola (1992) basadas en la novela de Bram Stoker.
El perfil del vampiro
Bela Lugosi, el actor que interpreta a Drácula en la versión del 31, tiene un aspecto enigmático y cuenta historias también enigmáticas para llamar la atención de las mujeres. No es tan sensual como Gary Oldman, el Drácula de Coppola, que sólo llama la atención de las mujeres con insinuaciones más sexuales que sensuales.
La interpretación del conde seguía la misma línea que en la obra teatral que participó por tres años Bela Lugosi en Broadway: un vampiro elegante que no enseñaba los colmillos (pues Lugosi desechó la idea de utilizarlos). Su poder era hipnótico, concentrado y corporal. Usaba una capa negra a en su espalada para ocultar a su víctima. Vaga por las brumosas calles como un alma distante, casi inmaterial, con una idea fija en la mente: nuevas víctimas y sangre, porque "la sangre es vida".
En la versión de Coppola, el Conde Drácula tiene un perfil más monstruoso, pero aparece como un enamorado, que todo lo que hace, lo hace por amor. Muestra sus colmillos y no sólo aparece como un vampiro, sino también como lobo, viento, y otros animales. Es elegante, pero no tan formal como Bela Lugosi en 1931.
Cómo es el perfil femenino
En la versión de Lugosi el perfil femenino aparece como algo más secundario. Drácula se interesa por Mina en cuanto la ve, pero no es algo tan pensado y premeditado como en la versión de Coppola. No hay amor. Aparece la mujer como mero instrumento para que Drácula satisfaga su sed de sangre.
En cambio, en la versión de Coppola aparece la mujer como personaje desencadenante de toda la historia que se desarrollará. El amor por esa mujer le hará hacer a Drácula las terribles cosas que hace.
Por otro lado, en cuanto a sensualidad, no cabe duda que, por más que en la versión primera hay algo de sensualidad para la época, en el caso de Coppola, ya pasa de la sensualidad a la sexualidad. Es explícita.
La sangre
En la versión del 31 directamente no aparece sangre casi. En la de Coppola hay sangre en todo momento. Hasta se vomita sangre, algo parecido al Exorcista. Esta versión, hablando de exorcismos, tiene más aspectos religiosos que la primera. Hay todo un argumento sólido por detrás que no escapa a lo religioso, por más que esto se vea, en menor medida, en la versión de Lugosi.
También está el problema del sida. En tiempos de la versión del Drácula de Coppola la enfermedad del sida estaba en pleno furor. Una enfermedad que, como con los vampiros, se contagia por medio de la sangre. Además el sida, que se transmite por el acto sexual, podría ser la causa de que la película sea tan sexual.
Expresionismo aleman en el cine
El expresionismo fue una corriente artística que buscó la exteriorización de los sentimientos y las emociones del autor, más que la representación de la realidad objetiva. El movimiento apareció en los primeros años del siglo XX como reacción frente a los modelos que habían prevalecido en Europa desde el Renacimiento. Fue una de las primeras vanguardias del siglo XX.
El artista expresionista trató de representar la experiencia emocional en su forma más completa, sin preocuparse de la realidad externa, sin de su naturaleza interna y de las emociones que despierta en el observador. Para lograrlo, los temas se exageran y se distorsionan con el fin de intensificar la comunicación artística.
El siglo XX estuvo cargado de guerras y negatividad. El expresionismo aparece como el movimiento de vanguardia que articula estéticamente este comienzo de crisis en la apertura violenta del nuevo siglo.
El expresionismo, dice De Micheli, es un "arte de oposición". Oposición al positivismo y sus maléficas insidias.
Para los expresionistas la realidad era algo que había que experimentar desde la más profunda interioridad, y así apelaban a vivencias corporales y emocionales del mundo más que a su captación por el ojo (como hacían los impresionistas).
El expresionismo en el cine se sitúa en torno a 1917. Fue un nuevo estilo de hacer películas basado en las características estilísticas del movimiento expresionista en pintura, tal como el uso del claroscuro, las atmósferas oníricas y los exagerados ángulos y composiciones.
Algunos ejemplos de cine expresionista alemán son El gabinete del doctor Caligari (1919), Metrópolis (1927), Nosferatu (1922), etc.
Individualismo y ciencia ficcion
(Similitudes entre Metrópolis y Blade Runner)
Metrópolis
Fritz Lang
Alemania, 1927
Género: Ciencia ficción
Blade Runner
Ridley Scott
Estados Unidos, 1982
Género: Ciencia ficción
Hay varias similitudes entre las obras míticas de ciencia ficción Metrópolis y Blade Runner (1982). Los replicantes de la segunda se parecen a los obreros subterráneos de la película de Fritz Lang, cuyo único fin es servir a los señores. Señores creadores de un nuevo mundo. Deckard puede asimilarse al hijo del amo en Metrópolis, Freder. En ambas películas es el amor quien les enseña a comprender que los esclavos o réplicos sufren y aman como los que viven en la superficie en Metrópolis o como los humanos en Blade Runner.
La visión fatalista en Metrópolis de los abusos a los que la clase obrera se somete es una cruel metáfora aún hoy vigente. El discurso de Blade Runner es existencialista. El creador omnipotente es incapaz de conocer el sufrimiento de sus criaturas. Ambas películas tienen una visión egoísta de la posmodernidad. Individualista. El creador se ocupa de la logística de un proyecto que le traerá beneficios propios. Y lo demás no es asunto suyo.
También se puede ver soberbia y poder. Algo parecido, quizá, a cualquier tipo de creación científica hoy vivida, como puede ser la clonación humana. Tiene, además de una temática social, una temática religiosa. La creatividad humana siempre requiere de otros elementos ya creados para lograr su proyecto, su ambición. No es ex nihilo y precisamente eso la diferencia de la Creación divina. Para los creyentes, hay un Dios que crea con una intención buena, no por mero individualismo o antojo. Esto es, justamente, lo que no se ve en las películas (sobre todo en Blade Runner, más relacionada con la ciencia, quizá). Los humanos tienen errores. Parece que los errores de la posmodernidad serán la soberbia y el individualismo. Y esta es la principal esencia que tienen en común Metrópolis y Blade Runner.
Metrópolis
Fritz Lang
Alemania, 1927
Género: Ciencia ficción
Blade Runner
Ridley Scott
Estados Unidos, 1982
Género: Ciencia ficción
Hay varias similitudes entre las obras míticas de ciencia ficción Metrópolis y Blade Runner (1982). Los replicantes de la segunda se parecen a los obreros subterráneos de la película de Fritz Lang, cuyo único fin es servir a los señores. Señores creadores de un nuevo mundo. Deckard puede asimilarse al hijo del amo en Metrópolis, Freder. En ambas películas es el amor quien les enseña a comprender que los esclavos o réplicos sufren y aman como los que viven en la superficie en Metrópolis o como los humanos en Blade Runner.
La visión fatalista en Metrópolis de los abusos a los que la clase obrera se somete es una cruel metáfora aún hoy vigente. El discurso de Blade Runner es existencialista. El creador omnipotente es incapaz de conocer el sufrimiento de sus criaturas. Ambas películas tienen una visión egoísta de la posmodernidad. Individualista. El creador se ocupa de la logística de un proyecto que le traerá beneficios propios. Y lo demás no es asunto suyo.
También se puede ver soberbia y poder. Algo parecido, quizá, a cualquier tipo de creación científica hoy vivida, como puede ser la clonación humana. Tiene, además de una temática social, una temática religiosa. La creatividad humana siempre requiere de otros elementos ya creados para lograr su proyecto, su ambición. No es ex nihilo y precisamente eso la diferencia de la Creación divina. Para los creyentes, hay un Dios que crea con una intención buena, no por mero individualismo o antojo. Esto es, justamente, lo que no se ve en las películas (sobre todo en Blade Runner, más relacionada con la ciencia, quizá). Los humanos tienen errores. Parece que los errores de la posmodernidad serán la soberbia y el individualismo. Y esta es la principal esencia que tienen en común Metrópolis y Blade Runner.
domingo, 2 de septiembre de 2007
La mano de Dios
El camino de San Diego
Carlos Sorín
Argentina 2006
Género: Comedia dramática
El camino de San Diego cuenta la historia de Tati Benítez, un hachero de Misiones (Argentina) sin trabajo, fanático de Diego Maradona.
La historia corre en el 2004, cuando Diego es hospitalizado por una afección cardíaca. Y Tati decide emprender un largo y cargado viaje hacia Buenos Aires, para llevarle a Diego como ofrenda un tronco de árbol que, para él, es idéntico al diez.
Más allá del viaje y de la cantidad de gente que conoce Tati. Y más allá del simpático humor de varios diálogos a lo largo de la película, hay, de fondo un tema digno de llamar la atención.
Carlos Sorín muestra que puede haber esperanza, bondad y humildad entre la pobreza misionera. También ingenuidad. En un contexto económico y social bastante precario parece que la creencia en ciertos personajes míticos (vivos o muertos) hace la vida más llevadera. Y todo es más fácil.
Más fácil porque el pensamiento se reduce a explicar todos los acontecimientos como destino. Siempre hay lógica y, por lo tanto, satisfacción racional y, más importante aún, emocional. Para todo creyente las cosas pasan por algo. Todo tiene un por qué. Y siempre hay esperanza porque los milagros existen. Y justamente es este el hilo conductor de El camino de San Diego.
Sorín deja ver en esta historia que, para lograr esa felicidad y esperanza entre la desesperanza, hay que creer. La fe lo es todo y no importa en quién o en qué se cree, sino el simple hecho de creer en algo y tener la certeza de que existe. No importa si es San Pedro, Gauchito Gil, Maradona o Jesús. Aquí no importa.
Carlos Sorín
Argentina 2006
Género: Comedia dramática
El camino de San Diego cuenta la historia de Tati Benítez, un hachero de Misiones (Argentina) sin trabajo, fanático de Diego Maradona.
La historia corre en el 2004, cuando Diego es hospitalizado por una afección cardíaca. Y Tati decide emprender un largo y cargado viaje hacia Buenos Aires, para llevarle a Diego como ofrenda un tronco de árbol que, para él, es idéntico al diez.
Más allá del viaje y de la cantidad de gente que conoce Tati. Y más allá del simpático humor de varios diálogos a lo largo de la película, hay, de fondo un tema digno de llamar la atención.
Carlos Sorín muestra que puede haber esperanza, bondad y humildad entre la pobreza misionera. También ingenuidad. En un contexto económico y social bastante precario parece que la creencia en ciertos personajes míticos (vivos o muertos) hace la vida más llevadera. Y todo es más fácil.
Más fácil porque el pensamiento se reduce a explicar todos los acontecimientos como destino. Siempre hay lógica y, por lo tanto, satisfacción racional y, más importante aún, emocional. Para todo creyente las cosas pasan por algo. Todo tiene un por qué. Y siempre hay esperanza porque los milagros existen. Y justamente es este el hilo conductor de El camino de San Diego.
Sorín deja ver en esta historia que, para lograr esa felicidad y esperanza entre la desesperanza, hay que creer. La fe lo es todo y no importa en quién o en qué se cree, sino el simple hecho de creer en algo y tener la certeza de que existe. No importa si es San Pedro, Gauchito Gil, Maradona o Jesús. Aquí no importa.
domingo, 26 de agosto de 2007
Magnates de la comedia
Max Linder (1883-1925)
Fue el cómico de cine mudo francés más exitoso de su época hasta el surgimiento de Charles Chaplin, quien reconoció ser su discípulo.
Encarnó a un personaje distinguido, de elegante vestimenta, que se veía siempre en algún insólito enredo. En 1912 era el actor cinematográfico mejor pagado de Francia.
Condenado por las generaciones posteriores a un olvido casi absoluto, la presentación, en 1963, de la película En compagnie de Max Linder, reivindicó su obra a partir de los esfuerzos de su hija Maud Linder. La película, narrada por el famoso director francés René Clair, significó el principio de una justa revalorización que puso a Max Linder entre los grandes nombres del cine mudo.
Entre sus innumerables películas destacan: La leyenda de Polichinela (1907), Un casamiento americano (1908-09), La flauta maravillosa y ¿Quién es el asesino? (1910), Max busca una novia (1911), Idilio en la granja (1912), Boda imprevista (1913), Max condecorado (1914), Max entre dos fuegos (1915), El pequeño café (1919), Sea usted mi mujer (1921), Siete años de mala suerte (1923), Socorro (1924) y El rey del circo (1925).
Mack Sennett (1880-1960)
Fue un innovador de la comedia slapstick (tipo de comedia que implica la exageración de la violencia física). A lo largo de su vida fue a menudo reconocido como “El Rey de la Comedia”.
En 1912 fundó Keystone Studios en Los Angeles, California. Las comedias de Sennett eran famosas por sus salvajes carreras de coches y por las batallas de pasteles.
Su primera actriz fue Mabel Normand, que se convirtió en una estrella (y con la cual tuvo una tormentosa relación personal). En sus películas figuraban un conjunto de chicas conocidas como las Sennett Bathing Beauties (bellezas de baño Sennett).
Sennett también creó las Kid Comedies, antecesoras de las películas de Our Gang.
En 1917 Sennett dejó la marca Keystone y organizó su propia compañía, Mack Sennett Comedies Corporation, produciendo cortos cómicos de mayor duración y unos pocos largometrajes. Durante los años veinte sus cortos tuvieron gran demanda.
Sennett ocasionalmente experimentó con el color y fue el primero en dar al mercado un corto sonoro, en 1928. Pero su estudio no sobrevivió a la Gran Depresión.
En marzo de 1938 fue premiado con un Oscar honorífico: “Por su duradera contribución a la técnica de la comedia cinematográfica, cuyos principios básicos son tan importantes hoy como cuando se pusieron en práctica por primera vez, la Academia presenta un especial reconocimiento al maestro de la diversión, descubridor de estrellas, amable, comprensivo genio de la comedia, Mack Senett”.
Fue el cómico de cine mudo francés más exitoso de su época hasta el surgimiento de Charles Chaplin, quien reconoció ser su discípulo.
Encarnó a un personaje distinguido, de elegante vestimenta, que se veía siempre en algún insólito enredo. En 1912 era el actor cinematográfico mejor pagado de Francia.
Condenado por las generaciones posteriores a un olvido casi absoluto, la presentación, en 1963, de la película En compagnie de Max Linder, reivindicó su obra a partir de los esfuerzos de su hija Maud Linder. La película, narrada por el famoso director francés René Clair, significó el principio de una justa revalorización que puso a Max Linder entre los grandes nombres del cine mudo.
Entre sus innumerables películas destacan: La leyenda de Polichinela (1907), Un casamiento americano (1908-09), La flauta maravillosa y ¿Quién es el asesino? (1910), Max busca una novia (1911), Idilio en la granja (1912), Boda imprevista (1913), Max condecorado (1914), Max entre dos fuegos (1915), El pequeño café (1919), Sea usted mi mujer (1921), Siete años de mala suerte (1923), Socorro (1924) y El rey del circo (1925).
Mack Sennett (1880-1960)
Fue un innovador de la comedia slapstick (tipo de comedia que implica la exageración de la violencia física). A lo largo de su vida fue a menudo reconocido como “El Rey de la Comedia”.
En 1912 fundó Keystone Studios en Los Angeles, California. Las comedias de Sennett eran famosas por sus salvajes carreras de coches y por las batallas de pasteles.
Su primera actriz fue Mabel Normand, que se convirtió en una estrella (y con la cual tuvo una tormentosa relación personal). En sus películas figuraban un conjunto de chicas conocidas como las Sennett Bathing Beauties (bellezas de baño Sennett).
Sennett también creó las Kid Comedies, antecesoras de las películas de Our Gang.
En 1917 Sennett dejó la marca Keystone y organizó su propia compañía, Mack Sennett Comedies Corporation, produciendo cortos cómicos de mayor duración y unos pocos largometrajes. Durante los años veinte sus cortos tuvieron gran demanda.
Sennett ocasionalmente experimentó con el color y fue el primero en dar al mercado un corto sonoro, en 1928. Pero su estudio no sobrevivió a la Gran Depresión.
En marzo de 1938 fue premiado con un Oscar honorífico: “Por su duradera contribución a la técnica de la comedia cinematográfica, cuyos principios básicos son tan importantes hoy como cuando se pusieron en práctica por primera vez, la Academia presenta un especial reconocimiento al maestro de la diversión, descubridor de estrellas, amable, comprensivo genio de la comedia, Mack Senett”.
Propaganda socialista
El acorazado Potemkin
Serguèi Eisenstein
País: URSS
Año: 1925
Género: Drama histórico
¿Cuál es el hecho histórico que cuenta?
En 1905 se dio una revuelta antigubernamental generalizada en todo el Imperio Ruso. El descontento se debía a que el paso de la sociedad feudal absolutista al capitalismo había generado cambios económicos, legales y sociales, pero el sistema político seguía intacto (régimen zarista). El 22 de enero, mientras las masas reclamaban al Zar Nicolas II mejores condiciones laborales, entre otras cosas, los policías mataron a más de mil personas en lo que se llamó “Bloody Sunday”. Este hecho provocó el divorcio entre el Zar y las masas, lo que incentivó aún más al desarrollo de la Revolución.
Los principales movimientos fueron llevados a cabo por campesinos, obreros, intelectuales liberales y minorías étnicas.
El Potemkin se hizo famoso por la sublevación de sus tripulantes contra los opresivos oficiales en junio de 1905. Fue visto, posteriormente, como un paso inicial hacia la Revolución Rusa de 1917.
Se dice que el problema comenzó porque varios miembros de la tripulación se negaron a comer una carne a la que se le habían descubierto gusanos.
Los hechos exactos que provocaron el motín siguen siendo desconocidos, y han sido totalmente sustituidos por la versión presentada por la película de Serguei Eisenstein. Lo cierto es que la disciplina en la marina del Zar era muy dura; y la moral, baja tras las derrotas en la guerra Ruso-Japonesa.
La noche del mismo día, el acorazado llegó al puerto de Odessa, ondeando una bandera roja. En la ciudad se había declarado una huelga general y la llegada del buque rebelde contribuyó a aumentar la inestabilidad. Sin embargo, los representantes de la comisión de contacto de los partidos socialdemócratas en Odessa fueron incapaces de convencer a los marineros sublevados de que desembarcaran grupos armados para ayudar a los obreros a conseguir más armas y actuar de forma conjunta. Había división y confusión entre marineros y huelguistas.
El 16 de junio, el funeral de Vakulenchuk (marinero mortalmente herido durante el motín) se convirtió en una manifestación política. La película muestra como los manifestantes se acumularon en la escalinata que lleva desde la zona del puerto al centro de la ciudad, donde sufrieron disparos por parte de unidades de caballería desmontada. Sin embargo, existe controversia acerca de la existencia o no de este tiroteo.
Es dudoso que esa matanza ocurriera realmente en Odessa, o por lo menos no perece que haya ocurrido en relación con el motín del acorazado. Algunos autores sostienen que la matanza existió y que incluso Eisenstein entrevistó a los supervivientes.
El resto de la historia es cierta. Existió realmente el motín del acorazado Potemkin, pero la historia no acabó bien: los marinos fueron apresados poco después en Ucrania por la armada del Zar y condenados a muerte.
¿Cómo fue el montaje?
Eisenstein realizó un montaje intelectual, ideológico y sin demasiada preocupación por algunos desajustes cualitativos. Quiso destacar algunos secuencias más que otras, por puro valor ideológico, para logran tensión y emotividad. También enseñar. Eisenstein rompe con los moldes tradicionales de montaje.
Los objetos y los personajes se unen y se separan, entran y salen, se unen de variadas formas provocando el desconcierto del espectador, que se obliga a pensar, preguntándose qué sucede en la pantalla, adquiriendo conciencia por sí mismo de los hechos que ve.
Eisenstein realiza el montaje con libertad de situaciones y con escenas arbitrariamente elegidas, independientes entre sí pero con una orientación precisa hacia un determinado efecto temático final. Una ideología final. Y la educación y expansión como objetivo.
La secuencia completa de las escaleras de Odessa, es una muestra única para explicar ese tipo de montaje.
Serguèi Eisenstein
País: URSS
Año: 1925
Género: Drama histórico
¿Cuál es el hecho histórico que cuenta?
En 1905 se dio una revuelta antigubernamental generalizada en todo el Imperio Ruso. El descontento se debía a que el paso de la sociedad feudal absolutista al capitalismo había generado cambios económicos, legales y sociales, pero el sistema político seguía intacto (régimen zarista). El 22 de enero, mientras las masas reclamaban al Zar Nicolas II mejores condiciones laborales, entre otras cosas, los policías mataron a más de mil personas en lo que se llamó “Bloody Sunday”. Este hecho provocó el divorcio entre el Zar y las masas, lo que incentivó aún más al desarrollo de la Revolución.
Los principales movimientos fueron llevados a cabo por campesinos, obreros, intelectuales liberales y minorías étnicas.
El Potemkin se hizo famoso por la sublevación de sus tripulantes contra los opresivos oficiales en junio de 1905. Fue visto, posteriormente, como un paso inicial hacia la Revolución Rusa de 1917.
Se dice que el problema comenzó porque varios miembros de la tripulación se negaron a comer una carne a la que se le habían descubierto gusanos.
Los hechos exactos que provocaron el motín siguen siendo desconocidos, y han sido totalmente sustituidos por la versión presentada por la película de Serguei Eisenstein. Lo cierto es que la disciplina en la marina del Zar era muy dura; y la moral, baja tras las derrotas en la guerra Ruso-Japonesa.
La noche del mismo día, el acorazado llegó al puerto de Odessa, ondeando una bandera roja. En la ciudad se había declarado una huelga general y la llegada del buque rebelde contribuyó a aumentar la inestabilidad. Sin embargo, los representantes de la comisión de contacto de los partidos socialdemócratas en Odessa fueron incapaces de convencer a los marineros sublevados de que desembarcaran grupos armados para ayudar a los obreros a conseguir más armas y actuar de forma conjunta. Había división y confusión entre marineros y huelguistas.
El 16 de junio, el funeral de Vakulenchuk (marinero mortalmente herido durante el motín) se convirtió en una manifestación política. La película muestra como los manifestantes se acumularon en la escalinata que lleva desde la zona del puerto al centro de la ciudad, donde sufrieron disparos por parte de unidades de caballería desmontada. Sin embargo, existe controversia acerca de la existencia o no de este tiroteo.
Es dudoso que esa matanza ocurriera realmente en Odessa, o por lo menos no perece que haya ocurrido en relación con el motín del acorazado. Algunos autores sostienen que la matanza existió y que incluso Eisenstein entrevistó a los supervivientes.
El resto de la historia es cierta. Existió realmente el motín del acorazado Potemkin, pero la historia no acabó bien: los marinos fueron apresados poco después en Ucrania por la armada del Zar y condenados a muerte.
¿Cómo fue el montaje?
Eisenstein realizó un montaje intelectual, ideológico y sin demasiada preocupación por algunos desajustes cualitativos. Quiso destacar algunos secuencias más que otras, por puro valor ideológico, para logran tensión y emotividad. También enseñar. Eisenstein rompe con los moldes tradicionales de montaje.
Los objetos y los personajes se unen y se separan, entran y salen, se unen de variadas formas provocando el desconcierto del espectador, que se obliga a pensar, preguntándose qué sucede en la pantalla, adquiriendo conciencia por sí mismo de los hechos que ve.
Eisenstein realiza el montaje con libertad de situaciones y con escenas arbitrariamente elegidas, independientes entre sí pero con una orientación precisa hacia un determinado efecto temático final. Una ideología final. Y la educación y expansión como objetivo.
La secuencia completa de las escaleras de Odessa, es una muestra única para explicar ese tipo de montaje.
jueves, 23 de agosto de 2007
La esperanza en la desesperanza
El baño del Papa
Dirección: Enrique Fernández y César Charlone
País: Uruguay
Año: 2007
Género: Tragicomedia
¿Cómo se financió El baño del Papa?
El Baño del Papa recibió múltiples apoyos económicos e institucionales en el ámbito nacional e internacional. Es una coproducción con O2 Films y Chaya Films. Además contó con la asociación de Teleimage.
En 2002 ganó el concurso de fondos del FONA (Fondo para el Fomento y Desarrollo de la Producción Nacional Audiovisual), también obtuvo el fondo de coproducción de IBERMEDIA 2003 y la Intendencia Municipal de Montevideo ingresó como socio financiero a través del programa MVD Socio Audiovisual (fondo para la coproducción).
En marzo de 2005, se convirtió en la primera película uruguaya en recibir apoyo (120.000 euros) de FONDS SUD, Francia. Este es uno de los fondos de apoyo a la producción más importantes y exigentes a nivel europeo. Y en abril de 2006 obtuvo el premio “Cine en construcción” de Toulouse para su finalización.
Fue, también, auspiciado por la Intendencia Municipal de Cerro Largo, por el Ministerio del Interior, y de Turismo y Deportes. Obtuvo el apoyo del Instituto Nacional del Audiovisual (Ministerio de Educación y Cultura).
¿Qué cosas son profundamente uruguayas y qué cosas son profundamente universales?
El baño del Papa es una película con estética local y, a pesar de esto, logró emocionar, convencer y atraer los aplausos de un público de múltiples países.
El director del largometraje, Enrique Fernández, dijo en una entrevista con El Espectador que “el fuerte de la película”, lo que logró que “aterrizara” en Cannes fue la historia de la familia del Beto, con las aspiraciones de su hija y su esposa tolerante. Lo que siente esa familia “es lo que sentiría una familia en cualquier lado”, aseguró Fernández.
Por otro lado, se puede decir que la realidad de miseria, de los kileros y la aduana, la esperanza entre la pobreza y muchos de los chistes con doble sentido son profundamente uruguayos.
Además, Fernández señaló que en Cannes la película se vio como un drama, básicamente. En cambio, en el preestreno escuchó risas que no eran esperadas. En Uruguay El baño del Papa fue más una tragicomedia, que un drama puro y duro. “Aquí cambia el tono. Lo que vio el espectador aquí, creo yo, es otra cosa”.
Dirección: Enrique Fernández y César Charlone
País: Uruguay
Año: 2007
Género: Tragicomedia
¿Cómo se financió El baño del Papa?
El Baño del Papa recibió múltiples apoyos económicos e institucionales en el ámbito nacional e internacional. Es una coproducción con O2 Films y Chaya Films. Además contó con la asociación de Teleimage.
En 2002 ganó el concurso de fondos del FONA (Fondo para el Fomento y Desarrollo de la Producción Nacional Audiovisual), también obtuvo el fondo de coproducción de IBERMEDIA 2003 y la Intendencia Municipal de Montevideo ingresó como socio financiero a través del programa MVD Socio Audiovisual (fondo para la coproducción).
En marzo de 2005, se convirtió en la primera película uruguaya en recibir apoyo (120.000 euros) de FONDS SUD, Francia. Este es uno de los fondos de apoyo a la producción más importantes y exigentes a nivel europeo. Y en abril de 2006 obtuvo el premio “Cine en construcción” de Toulouse para su finalización.
Fue, también, auspiciado por la Intendencia Municipal de Cerro Largo, por el Ministerio del Interior, y de Turismo y Deportes. Obtuvo el apoyo del Instituto Nacional del Audiovisual (Ministerio de Educación y Cultura).
¿Qué cosas son profundamente uruguayas y qué cosas son profundamente universales?
El baño del Papa es una película con estética local y, a pesar de esto, logró emocionar, convencer y atraer los aplausos de un público de múltiples países.
El director del largometraje, Enrique Fernández, dijo en una entrevista con El Espectador que “el fuerte de la película”, lo que logró que “aterrizara” en Cannes fue la historia de la familia del Beto, con las aspiraciones de su hija y su esposa tolerante. Lo que siente esa familia “es lo que sentiría una familia en cualquier lado”, aseguró Fernández.
Por otro lado, se puede decir que la realidad de miseria, de los kileros y la aduana, la esperanza entre la pobreza y muchos de los chistes con doble sentido son profundamente uruguayos.
Además, Fernández señaló que en Cannes la película se vio como un drama, básicamente. En cambio, en el preestreno escuchó risas que no eran esperadas. En Uruguay El baño del Papa fue más una tragicomedia, que un drama puro y duro. “Aquí cambia el tono. Lo que vio el espectador aquí, creo yo, es otra cosa”.
domingo, 19 de agosto de 2007
Antiguedad fantástica
300
Dirección: Zack Snyder
Basada en la novela gráfica de Frank Miller
País: Estados Unidos
Año: 2006
Género: Acción
¿Cómo se conoce hoy la historia de la Batalla de las Termópilas?
Estos hechos se conocen por los relatos escritos del considerado padre de la historiografía: Heródoto. Los nueve libros de historia de Heródoto fueron una fuente importantísima para los historiadores, ya que es la primera descripción del mundo antiguo a gran escala.
El primer párrafo de esta obra anuncia: “Heródoto de Halicarnaso presenta aquí las resultas de su investigación para que el tiempo no abata el recuerdo de las acciones de los hombres y que las grandes empresas acometidas, ya sea por los griegos, ya por los bárbaros, no caigan en olvido; da también razón del conflicto que puso a estos dos pueblos en la lid”.
En su obra, Heródoto narra aspectos curiosos de los pueblos y los hombres. También describe aspectos de la historia, la geografía y la etnografía de sus tiempos. Para esto recurrió a fuentes orales y escritas, tanto de la literatura como de su propia experiencia. Es así que cita a Homero, Esquilo y Anacreonte, entre otros. Cuando menciona las fuentes orales, expresa: “según los griegos” o “a decir de los persas”, etc.
Él mismo era consciente del carácter parcial y poco fiable de sus fuentes, fue así que escribió:
Frank Millar, el autor de la novela gráfica 300, tomó como referencia los relatos de Heródoto y la película El león de Esparta, entre otras fuentes.
El ejército espartano y el ejército persa
Tal como aparece en esta película, la educación espartana se llamó agogé. Esta educación de los hombres que constituirían el ejército fue uno de los rasgos más característicos y definitorios de la sociedad espartana.
La agogé era obligatoria. Constituyó un requisito indispensable para la plena ciudadanía. Para Jenofonte, aquellos que no pasaban por la agogé eran ciudadanos de categoría inferior que no podían acceder a las magistraturas ni a los cuerpos de elite.
Los ciudadanos se preparaban para la vida militar desde los siete años. A partir de esta edad se los separaba de sus familias y comenzaban a vivir en barracones con compañeros de su misma edad. Eran sometidos a un entrenamiento que buscaba convertirlos en guerreros perfectos, preocupados sólo por el bien del Estado.
La agogé se empezó a desarrollar a partir del siglo VI a.C. y la organizó el Estado. Fue el Gobierno quien gestionó la educación pública como una de las principales misiones. Este sistema fue elogiado por Platón.
Si el ejército espartano se basó en la perfección y el profesionalismo, el ejército persa fue todo lo contrario. El principal punto débil del imperio persa fue su organización militar.
A pesar de contar con un ejército y una flota incomparable en número, su organización y logística dejaban mucho que desear. El ejército estaba compuesto por un núcleo de elite, que era la guardia personal del emperador (también llamados los inmortales). Luego se sumaban soldados de todos los pueblos dominados. Era un ejército muy heterogéneo, que carecía de unidad y tácticas para combatir.
De esta manera, un pequeño número de espartanos (como sucedió en la batalla de las Termópilas) podía mantener a raya a un contingente persa varias veces superior en número.
Dirección: Zack Snyder
Basada en la novela gráfica de Frank Miller
País: Estados Unidos
Año: 2006
Género: Acción
¿Cómo se conoce hoy la historia de la Batalla de las Termópilas?
Estos hechos se conocen por los relatos escritos del considerado padre de la historiografía: Heródoto. Los nueve libros de historia de Heródoto fueron una fuente importantísima para los historiadores, ya que es la primera descripción del mundo antiguo a gran escala.
El primer párrafo de esta obra anuncia: “Heródoto de Halicarnaso presenta aquí las resultas de su investigación para que el tiempo no abata el recuerdo de las acciones de los hombres y que las grandes empresas acometidas, ya sea por los griegos, ya por los bárbaros, no caigan en olvido; da también razón del conflicto que puso a estos dos pueblos en la lid”.
En su obra, Heródoto narra aspectos curiosos de los pueblos y los hombres. También describe aspectos de la historia, la geografía y la etnografía de sus tiempos. Para esto recurrió a fuentes orales y escritas, tanto de la literatura como de su propia experiencia. Es así que cita a Homero, Esquilo y Anacreonte, entre otros. Cuando menciona las fuentes orales, expresa: “según los griegos” o “a decir de los persas”, etc.
Él mismo era consciente del carácter parcial y poco fiable de sus fuentes, fue así que escribió:
“Si yo me veo en el deber de referir lo que se cuenta, no me veo obligado a creérmelo todo a rajatabla; y que esta afirmación se aplique a la totalidad de mi obra” (VII, 151, 3).
Frank Millar, el autor de la novela gráfica 300, tomó como referencia los relatos de Heródoto y la película El león de Esparta, entre otras fuentes.
El ejército espartano y el ejército persa
Tal como aparece en esta película, la educación espartana se llamó agogé. Esta educación de los hombres que constituirían el ejército fue uno de los rasgos más característicos y definitorios de la sociedad espartana.
La agogé era obligatoria. Constituyó un requisito indispensable para la plena ciudadanía. Para Jenofonte, aquellos que no pasaban por la agogé eran ciudadanos de categoría inferior que no podían acceder a las magistraturas ni a los cuerpos de elite.
Los ciudadanos se preparaban para la vida militar desde los siete años. A partir de esta edad se los separaba de sus familias y comenzaban a vivir en barracones con compañeros de su misma edad. Eran sometidos a un entrenamiento que buscaba convertirlos en guerreros perfectos, preocupados sólo por el bien del Estado.
La agogé se empezó a desarrollar a partir del siglo VI a.C. y la organizó el Estado. Fue el Gobierno quien gestionó la educación pública como una de las principales misiones. Este sistema fue elogiado por Platón.
Si el ejército espartano se basó en la perfección y el profesionalismo, el ejército persa fue todo lo contrario. El principal punto débil del imperio persa fue su organización militar.
A pesar de contar con un ejército y una flota incomparable en número, su organización y logística dejaban mucho que desear. El ejército estaba compuesto por un núcleo de elite, que era la guardia personal del emperador (también llamados los inmortales). Luego se sumaban soldados de todos los pueblos dominados. Era un ejército muy heterogéneo, que carecía de unidad y tácticas para combatir.
De esta manera, un pequeño número de espartanos (como sucedió en la batalla de las Termópilas) podía mantener a raya a un contingente persa varias veces superior en número.
sábado, 18 de agosto de 2007
Orígenes del cine
Louis y Auguste Lumière
¿Cómo era, desde el punto de vista artístico, el mundo que recibió al cine?
La historia del cine comienza el 28 de diciembre de 1895, cuando los hermanos Lumière proyectaron públicamente la salida de obreros de una fábrica en París.
A finales del siglo XIX se comenzó a desarrollar una corriente de renovación artística y literaria, conocida como Modernismo (Art Nouveau en Francia). La estética modernista nace de una actitud de rebeldía, no sólo contra los gustos conservadores y burgueses del ambiente literario realista, sino contra los dogmas e imposiciones sociales, buscando una transformación espiritual y estética, de acuerdo con los cambios ocurridos en Europa (Revolución industrial).
El positivismo, la industrialización, la politización de la vida, el militarismo, la lucha de clases y el auge del capitalismo invalidaron los conceptos anteriores y dieron paso a otras tendencias, como el Parnasianismo, Simbolismo o Impresionismo, coincidentes en destacar el aspecto sensorial estético o idealista de las cosas.
Este arte nuevo tiene la intención de romper con los historicismos y el eclecticismo, corrientes artísticas dominantes del siglo XIX. Está la idea de “democratizar la belleza”, es decir, de hacer el arte algo masivo. Hasta los objetos más cotidianos pueden tener un valor estético y, además, ser asequibles a toda la población. Por eso el modernismo no se da sólo en las artes mayores, sino también en el mobiliario y todo tipo de objetos útiles en la vida cotidiana.
En el Modernismo literario abunda el exotismo, la mujer fatal que lleva a la perdición, la alusión a nobles y mundos desaparecidos. La característica principal es la búsqueda de la perfección en la expresión. Hay un interés por lo clásico y un olvido de lo nacionalista y lo religioso, para dar lugar a lo exótico.
¿Cómo era, desde el punto de vista artístico, el mundo que recibió al cine?
La historia del cine comienza el 28 de diciembre de 1895, cuando los hermanos Lumière proyectaron públicamente la salida de obreros de una fábrica en París.
A finales del siglo XIX se comenzó a desarrollar una corriente de renovación artística y literaria, conocida como Modernismo (Art Nouveau en Francia). La estética modernista nace de una actitud de rebeldía, no sólo contra los gustos conservadores y burgueses del ambiente literario realista, sino contra los dogmas e imposiciones sociales, buscando una transformación espiritual y estética, de acuerdo con los cambios ocurridos en Europa (Revolución industrial).
El positivismo, la industrialización, la politización de la vida, el militarismo, la lucha de clases y el auge del capitalismo invalidaron los conceptos anteriores y dieron paso a otras tendencias, como el Parnasianismo, Simbolismo o Impresionismo, coincidentes en destacar el aspecto sensorial estético o idealista de las cosas.
Este arte nuevo tiene la intención de romper con los historicismos y el eclecticismo, corrientes artísticas dominantes del siglo XIX. Está la idea de “democratizar la belleza”, es decir, de hacer el arte algo masivo. Hasta los objetos más cotidianos pueden tener un valor estético y, además, ser asequibles a toda la población. Por eso el modernismo no se da sólo en las artes mayores, sino también en el mobiliario y todo tipo de objetos útiles en la vida cotidiana.
En el Modernismo literario abunda el exotismo, la mujer fatal que lleva a la perdición, la alusión a nobles y mundos desaparecidos. La característica principal es la búsqueda de la perfección en la expresión. Hay un interés por lo clásico y un olvido de lo nacionalista y lo religioso, para dar lugar a lo exótico.
Innovación conservadora
El nacimiento de una nación
Dirección: D.W. Griffith
País: Estados Unidos
Año: 1915
Género: Drama
¿Quién fue Griffith y por qué filmó El nacimiento de una nación?
David Wark Griffith nació en 1875 en la zona rural de Kentucky, Estados Unidos. Se educó bajo la influencia dominante del Sur, con toda la carga de racismo que esto implicaba. Probablemente sea esta la principal causa de la parcialidad política que refleja El nacimiento de una nación.
Fue un filme muy polémico. Muchos lo tildaron de racista por mostrar a los negros como acosadores de jóvenes muchachas blancas. El Ku Klux Klan aparece, a mitad de la película, como un grupo de héroes justicieros que vienen a salvar a las mujeres, víctimas de la barbarie negra.
Evidentemente el Sur de Estados Unidos sufrió la guerra mucho más que el norte por el único hecho de haberla perdido. Y esto hizo que los vencidos heredaran, de generación a generación, orgullo, terquedad, complejo y vergüenza frente al Norte. Hasta el día de hoy existe esa rivalidad entre yankees y sureños, aunque menor.
Como en casi todo conflicto, hay culpa de las dos partes. Y en esta película no está muy clara esta visión. Más bien parece un resultado pretensioso de la rabia y obsesión contenidas del sureño Griffith, incapaces de ser saciadas en otro ámbito que no fuera el artístico.
Más allá de la temática política, no se puede negar que antes de D.W. Griffith las películas eran muy cortas y más anecdóticas que dramáticas. Tuvo la capacidad de reunir todas las técnicas cinematográficas preexistentes con otras nuevas y lograr un excelente resultado para la época.
Algunas de estas técnicas fueron el primer plano, los paneos y la iluminación interior más natural. También innovó con el flashback y la narración de varias historias paralelas.
Muchos críticos aseguraron que esta obra era “el nacimiento del arte cinematográfico”, ya que jamás el cine había abordado una narración tan larga y compleja con tanta agilidad, ritmo y coherencia narrativa. El nacimiento de una nación fue un punto de inflexión en la evolución del cine.
¿Quiénes luchan en la Guerra de Secesión y por qué hubo guerra en Estados Unidos?
Los dos bandos enfrentados en la guerra civil estadounidense fueron los estados del norte contra los recién formados Estados Confederados de América, integrados por once estados del sur que proclamaron su independencia.
Ambos bandos gozaban de una sociedad, política y economía muy diferentes. Mientras los estados del sur estaban interesados por una economía básicamente agraria con mano de obra esclava, el norte se mostraba a favor de la industria, el comercio y las finanzas.
Después de la independencia de Estados Unidos, el sur fue representado por Jefferson y lo que sería después el partido demócrata; y el norte por Hamilton y el partido federalista (más tarde republicano).
En marzo de 1861, cuando Lincoln tomó posesión de su cargo de presidente, Carolina del Sur, Mississipi, Florida, Alabama, Georgia, Louisiana y Texas se constituyeron en los Estados Confederados de América con Jefferson Davis como presidente, proclamando su secesión de la Unión, acto que Lincoln declaró ilegal en su discurso inaugural.
Lincoln tenía como prioridad mantener unido a su país. Se dice que apoyó la abolición de la esclavitud únicamente para lograr el apoyo interno y externo que le permitieran ganar la guerra.
Dirección: D.W. Griffith
País: Estados Unidos
Año: 1915
Género: Drama
¿Quién fue Griffith y por qué filmó El nacimiento de una nación?
David Wark Griffith nació en 1875 en la zona rural de Kentucky, Estados Unidos. Se educó bajo la influencia dominante del Sur, con toda la carga de racismo que esto implicaba. Probablemente sea esta la principal causa de la parcialidad política que refleja El nacimiento de una nación.
Fue un filme muy polémico. Muchos lo tildaron de racista por mostrar a los negros como acosadores de jóvenes muchachas blancas. El Ku Klux Klan aparece, a mitad de la película, como un grupo de héroes justicieros que vienen a salvar a las mujeres, víctimas de la barbarie negra.
Evidentemente el Sur de Estados Unidos sufrió la guerra mucho más que el norte por el único hecho de haberla perdido. Y esto hizo que los vencidos heredaran, de generación a generación, orgullo, terquedad, complejo y vergüenza frente al Norte. Hasta el día de hoy existe esa rivalidad entre yankees y sureños, aunque menor.
Como en casi todo conflicto, hay culpa de las dos partes. Y en esta película no está muy clara esta visión. Más bien parece un resultado pretensioso de la rabia y obsesión contenidas del sureño Griffith, incapaces de ser saciadas en otro ámbito que no fuera el artístico.
Más allá de la temática política, no se puede negar que antes de D.W. Griffith las películas eran muy cortas y más anecdóticas que dramáticas. Tuvo la capacidad de reunir todas las técnicas cinematográficas preexistentes con otras nuevas y lograr un excelente resultado para la época.
Algunas de estas técnicas fueron el primer plano, los paneos y la iluminación interior más natural. También innovó con el flashback y la narración de varias historias paralelas.
Muchos críticos aseguraron que esta obra era “el nacimiento del arte cinematográfico”, ya que jamás el cine había abordado una narración tan larga y compleja con tanta agilidad, ritmo y coherencia narrativa. El nacimiento de una nación fue un punto de inflexión en la evolución del cine.
¿Quiénes luchan en la Guerra de Secesión y por qué hubo guerra en Estados Unidos?
Los dos bandos enfrentados en la guerra civil estadounidense fueron los estados del norte contra los recién formados Estados Confederados de América, integrados por once estados del sur que proclamaron su independencia.
Ambos bandos gozaban de una sociedad, política y economía muy diferentes. Mientras los estados del sur estaban interesados por una economía básicamente agraria con mano de obra esclava, el norte se mostraba a favor de la industria, el comercio y las finanzas.
Después de la independencia de Estados Unidos, el sur fue representado por Jefferson y lo que sería después el partido demócrata; y el norte por Hamilton y el partido federalista (más tarde republicano).
En marzo de 1861, cuando Lincoln tomó posesión de su cargo de presidente, Carolina del Sur, Mississipi, Florida, Alabama, Georgia, Louisiana y Texas se constituyeron en los Estados Confederados de América con Jefferson Davis como presidente, proclamando su secesión de la Unión, acto que Lincoln declaró ilegal en su discurso inaugural.
Lincoln tenía como prioridad mantener unido a su país. Se dice que apoyó la abolición de la esclavitud únicamente para lograr el apoyo interno y externo que le permitieran ganar la guerra.
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